martes, 10 de enero de 2017

Refranes aplicados al mes de Enero.


Enero es el primer mes del año en nuestro calendario.  El invierno ha comenzado ya el 21 de diciembre y las condiciones atmosféricas centran la atención durante este mes. Sus noches son frías y largas, al menos por estos lares y no faltan las heladas, las nieves, aunque no tanto como antiguamente, y también las lluvias por más que este mes nos sea el más lluvioso. Los refranes referidos a enero nos recuerdan todo esto pero también otras muchas cosas relacionadas con la agricultura o ganadería, la alimentación y los cuidados necesarios para pasar el mes lo mejor posible.
El refrán es un dicho, corto o chico en extensión, pero grande en posibilidades, enseñanza y doctrina. Está escrito para el pueblo y por el pueblo. Y el pueblo casi nunca se equivoca, por su experiencia y sabiduría popular. Los refranes no dicen tonterías ni  cosas estúpidas, sino cosas probadas en el barco de la vida, en el vivir de cada día, cosas de todo tipo…También amor, alegría, penas, lágrimas, sumisión, ausencia, etc. Hay refranes para cualquier cosa o momento de la vida y cada pueblo, a veces, tiene sus propios refranes. Los refranes son como una memoria colectiva. (Celdrán G. P.).
Los refranes merecen atención y respeto, pues muchos de ellos han surgido, o han sido creados en el mundo rural y popular, hasta el punto de tenerlos siempre a mano y ser utilizados por las personas en el momento más apropiado, al realizar sus tareas en el campo, en el  hogar y  en el vivir diario. Y si los refranes merecen respeto también quienes los crearon, los utilizaron y siguen utilizándolos todavía. Y es que muchos de ellos fueron creados por gente sencilla, tal vez no muy instruida, pero llena de sabiduría popular. He aquí algunos de los que aplican o dicen sobre el mes de enero, sacados gran parte de ellos de los libros cuyo autor- recopilador fue F. Rodríguez Marín.
Agua de enero, cada gota vale un dinero.
De enero a enero, besugo quiero.
Enero, frío o templado, pásalo arropado.
Enero, buen mes para el carbonero.
Enero helado, febrero trastornado, marzo airoso, abril lluvioso, sacan a mayo florido y hermoso.
Enero de muchos hielos, febrero de muchas hebras, marzo de molinas, abril lluvioso y mayo ventoso harán el año abundoso.
Enero en polvo, trigo es todo.
Enero entrado, siembra tus ajos.
Enero es caballero, si no es ventolero.
Enero es como el buen caballero.
Enero es el mes primero; si viene frío,  es buen caballero.
Enero seco y heladero.
Enero polvoroso, febrero lluvioso.
Enero, mes de zamarra, buena lumbre amarra.
Enero, leña vieja, rancio vino, fresco tocino, y nueva pelleja.
Enero caliente, el diablo trae en el vientre.
Enero tiene el diente luengo.
Enero, buen mes para el carbonero.
Enero el friolero entra soplándose los dedos.
Enero, claro y helero.
Enero ya es huevero.
En enero, bufanda, capa y sombrero.
En enero busca la perdiz su compañero.
En enero cada oveja con su cordero.
En enero, de día al sol y de tarde al brasero.
En enero, déjale el rábano al rabanero.
En enero encienda la abuela el brasero.
En enero flores, en mayo dolores.
En enero, frío o templado, pásalo arropado.
En enero la berza es carnero.
En enero le sudan las narices al perro.
En enero nieblas, en mayo lluvias ciertas.
En enero no hay galgo lebrero, ni buey carretero.
En enero planta ajero, a fines que no a primeros.
En enero pierde ajos el ajero.
En enero se hiela el agua en el puchero.
En enero se hielan las berzas en el puchero.
En enero, un rato al sol y otro al humero.
En enero, pedir pepinos es desatino.
En enero la caña en el humero, en marzo la caña al brazo.
No hay luna como la de enero ni amor como el primero.
Por enero busca las liebres en los chapuceros o en los sumideros.
Por enero florece el romero.
Por enero vale más una gorra que un sombrero.
Quien pasa el mes de enero, pasa el año entero.