En este
mes comienza la primavera y con ella la mayoría de las plantas despiertan del
sueño vegetativo en el que han estado sumidas durante el invierno. El trabajo
en el jardín y en los campos es mucho mayor. Hay que terminar con la poda, los
trasplantes, abonar, cuidar los sembrados y los árboles, empezar a destruir las
malas hierbas y combatir las enfermedades, entre otras cosas. Poco a poco la
naturaleza va cambiando de color.
Respeto a
los fenómenos atmosféricos, suele ser un mes con mucho viento, y otros cambios,
como muy bien se nos dice en algunos refranes: Marzo
varía siete veces al día. Marzo ventoso y Abril lluvioso, sacan a Mayo
florido y hermoso. Mes de lluvias que, en general, son
beneficiosas para las cosechas.
Y es también un mes con muchos refranes, motivados, en
parte, por la llegada de la primavera y por los cambios meteorológicos a los que
me he referido con anterioridad.
En ocasiones,
son muchas las variantes existentes de un mismo refrán dependiendo, en gran
parte, de la localidad, comarca o región en la que se ha originado o en la más se
haya utilizado. Y es que la mayor parte de los refranes son de creación popular
y su forma de conocimiento, y posterior difusión, es la tradición oral.
Los refranes, sobre todo los de
meteorología, buscan señales que puedan prever cómo será la nueva estación, a
través del comportamiento de los animales como las golondrinas, los tordos o
los cucos, etc.
Del mes de marzo se espera un incremento de
las horas de sol, que empiece a sacar
del letargo invernal a los árboles, plantas y cultivos, que recibirán en abril
la lluvia necesaria para favorecer su crecimiento al máximo. Es de vital
importancia que cada elemento meteorológico se produzca en su justa medida,
puesto que los excesos son muy perjudiciales…Por ello los refranes de marzo nos
alertan constantemente de las traiciones y trampas meteorológicas que pueden
producirse en este mes, con cambios de tiempo que repentinamente nos hacen
retroceder al invierno más duro, no solo en distintos días, sino incluso en la
misma jornada. (Los refranes del tiempo. Equipo de El Tiempo en TVE).
Los siguientes refranes
están copiados de los libros de F. Rodríguez Marín: Más de 21000 refranes castellanos y 16000 refranes, no contenidos en la
copiosa colección del maestro Gonzalo Correas. Revista de Archivos,
Bibliotecas y Museos. Madrid, 1926.
Marzo, cual te hallo, tal te
marco.
Marzo de lluvias cargado, año muy desgraciado.
Marzo engañador, un día malo y otro peor.
Marzo es la puerta y abril trae la llave, si es que no está
la puerta.
Marzo es loco y abril no poco.
Marzo hambriento es mayo opulento.
Marzo igual (equinoccio).
Marzo, lluvia para el campo; porque, lo que es en la huerta,
cada gota quita un cuarto.
Marzo marceaba y abril aguanevaba.
Marzo marcero, cada oveja con su cordero.
Marzo marzadas: aire frío y granizadas.
Marzo marzuelo, un día malo y otro bueno.
Marzo, o malo o bueno, el buey a la hierba y a la sombra el
perro.
Marzo pardo, poco sol y malo.
Marzo pardo, señal de buen año.
Marzo que empieza bochornoso, pronto se vuelve granizoso.
Marzo se lleva la culpa y abril nos quita la fruta.
Marzo vuelve el rabo y si, al principio cordera, a la postre fiera.
Cuando marzo mayea, mayo marcea.
Cuando marzo mayea, mayo marcea.
De marzo a la mitad, la golondrina viene y el tordo se va.
De marzo al revés, cuida de la res.
En marzo asoma la cabeza el lagarto; y en abril acaba de
salir.
En marzo aumenta rediles, pero no cubiles.
En marzo cada gota quita un cuarto; y en abril cada gota
mil.
En marzo calor temprano, es para los campos sano.
En marzo como las pillo las alzo (sementeras).
En marzo al abrigo nueces, pan y trigo.
En marzo el sol riega, el agua quema.
En marzo florecen todos los campos.
En marzo la pepita y el garbanzo.
En marzo la siesta sobre el brazo, en abril sobre el mandil
y en mayo por largo.
En marzo las lluvias, en abril
las hierbas, y en mayo las flores ¡gran año de labradores¡.
En marzo, ni migas ni esparto.
En marzo, pan y pedazo; y en mayo sin contallo.
En marzo pega el sol como un pelmazo.
En marzo poda el ricacho; en abril el ruin.
En marzo, podar y cavar, si quieres recolectar.
En marzo saca la cabeza el lagarto.
En marzo, si cortas
un cardo, nacerte han cuatro; y en abril, si cortas cuatro, nacerte han mil.
En marzo tronar, cosa es de extrañar.
En marzo, tu hoz en el brazo y tu mujer en el zarzo.
Los siguientes proceden del libro citado anteriormente Los
Refranes del Tiempos. Equipo de TVE. Barcelona, 2014.
Marzo marcero, o tan frio como enero, o tan falso como
febrero.
Marzo marceador: de noche frio y de día calor.
Marzo mató a su padre y abril lo sacó a la calle.
Marzo marzán, por la mañana cara de ángel y por la tarde
cara de can.
En marzo, la veleta ni dos horas se está quieta.
En marzo tronar en cosa de extrañar.
Calor de marzo muy temprano es para el campo muy sano.
Marzo trae las hojas y noviembre las despoja.
Marzo, los almendros en flor y los mozos en amor.
De marzo a la mitad,
la golondrina viene y el tordo se va.
Las secas de marzo son lluvias en mayo.
En marzo el sol riega y el agua quema.
Marzo de lluvias cargado, hace del año desgraciado.
Si marzo se va y el cuco no viene, o se ha muerto el cuco o
la fin viene.