sábado, 11 de julio de 2015

Calles de Benavente: La Calle del Candil.



Siempre me llamó la atención esta pequeña calle. Seguro que alguna anécdota o leyenda en torno a ella pudo ser el origen de su nombre. Tal vez ocurriese que por su estrechez tuviese menos luz y alguien utilizase, en algunos momentos, este instrumento, el candil o una expresión que lo mencionase. Sería curioso conocerlo.
Lo que si he confirmado y puedo demostrar es que la calle, antigua y céntrica,  ya se denominaba así en 1860, según consta en un legajo del archivo Municipal. En este año contaba con 9 casas y un solar en una de las aceras, y en la otra con dos puertas accesorias, por las que seguramente se entraría a amplios corrales u otras dependencias existentes.   

Algunas casas antiguas de la calle en una fotografía del año 1973.
Esta pequeña, corta y estrecha calle, se encontraba, y se encuentra, dentro del casco histórico y antiguo de la ciudad, no lejos de la Plaza de la Madera ni de la iglesia de Santa María del Azogue, con casas unifamiliares construidas de adobe o tapial, materiales propios de aquella época, como muchas de las de su entorno. Y es que como muy bien dice J. C. de la Mata en su libro Sociedad y Prensa en Benavente (siglos XIX y XX), era así el entramado urbano de esta Villa en aquella época, una sucesión de calles estrechas, con pequeñas plazas y corrillos, destacando las torres de las iglesias…Y sin apenas proyección alguna fuera del viejo casco.
Pero, en la actualidad, estas casas han desaparecido, aunque contamos con imágenes de algunas. Una de ellas tenía fama y es conocida por los benaventanos como Casa Posada de la señora Pita. La verdad es que destaca entre las demás  por las ventanas o balcones con su original rejería. Precisamente en esta, según se cuenta en el libro citado, se hospedó la reina Isabel II durante su estancia en Benavente en septiembre del año 1858, al regresar a la Corte después de un viaje a Asturias.
Casa posada de la señora Pita.
También tengo noticias de que la cárcel de Benavente, que tuvo varias sedes, además de estar en el desaparecido convento de San Francisco, en una casa de la calle Zamora y en el depósito de la Remonta, estuvo también, durante un tiempo, en una casa de esta calle. 

La carcel de la Villa estuvo en una casa de esta calle.
En la actualidad  han desaparecido ya las casas antiguas y en su lugar se han construido edificios de varias plantas para viviendas, con garajes en los bajos de algunos de ellos, y otros servicios. También hay un solar sin edificar. 
A la derecha de estas casas comienza la calle del Candil.
Imágenes desde la Plaza de la Madera.
A la izquierda el solar que  hay en la calle.
Uno de los nuevos edificios en la calle yendo desde la Ronda de la Florida.
A la calle del Candil se puede acceder desde la Plaza de la Madera o desde la Ronda de la Florida. Al ser estrecha, con tráfico y coches estacionados en ella, es difícil el paso y el paseo, con normalidad, para las personas, e incluso para los vecinos cuando van a sus viviendas o quieren pasar por ella para ir a otra calle cercana. Pero esto mismo ocurre en otras partes de la ciudad, sobre todo en la zona  más antigua, histórica y artística de la misma, a pesar de ser considerada zona peatonal o semipeatonal.

Calle con poco espacio, y con aparcamiento de coches.
Aspecto de la calle vista desde la Ronda de la Florida.

Calle en la actualidad. Al fondo la Calle Ronda de la Florida.
Calle en el año 1973.  (Foto: E. P. Mencía).