miércoles, 30 de marzo de 2016

Benavente: Calle de Fernando II de León.


Se trata de una pequeña y corta calle, no más de 60-70 metros, que se encuentra entre la Ronda de Fernando III el Santo y La calle Santa Clara. No lejos de ella y en paralelo también está la  la calle con nombre de travesía, dedicada a Alfonso IX. Que estos reyes de León tengan una calle en Benavente no nos debe extrañar, sino todo lo contrario, lo que nos sigue sorprendiendo a muchos es el que no se les haya prestado un mayor recuerdo y atención, sobre todo a Fernando II, el rey repoblador de Benavente, como consta en la Carta  Puebla que concedió a la ciudad.
La calle completa. Al fondo la calle Santa Clara.
Vista de la calle  de Fernando II desde la C. Santa Clara. 



Algunas de las pequeñas casas de adobe que hay en la calle.
Final de la calle, cerca ya del Colegio Fernando II, al fondo.
El rey Fernando II de León, que subió al trono en el año 1157, murió en Benavente en  1188, aunque fue enterrado en la catedral de Santiago de Compostela, y allí se encuentra su sepultura.
Sepultura de Fernando II en Santiago de Compostela.
Con su hijo Alfonso IX son los dos reyes  que tuvo el Reino de León antes de su unión definitiva con Castilla, llevada a cabo por Fernando III el Santo.
Se caracterizó por su intensa labor repobladora, tanto en tierras fronterizas como en el interior del Reino. A él se debe también la repoblación de Benavente y la organización de su consejo municipal. En esta ciudad le gustaba pasar los cortos períodos de tiempo que sus ocupaciones guerreras y repobladoras le permitían.
Benavente sigue recordando a su rey en los documentos que se conservan en el archivo histórico del Ayuntamiento de la ciudad, como son la Carta Puebla de 1167 y el Privilegio que amplía el alfoz en 1181. El estudio de estos documentos puede leerse en el libro Privilegios Reales de la Villa de Benavente (siglos XII-XIV), que fue publicado por el CEB “Ledo del Pozo” en 1996.

Privilegio-Carta Puebla de Benavente, 1167.
Sello rodado de Fernando II en la Carta Puebla de Benavente.
Pinturas. Tumbo A de Santiago.
Sello rodado del Privilegio del Concejo de Benavente.
Como ya escribí, en otra ocasión, en mi blog Patrimonio Popular, a Fernando II, en la actualidad, se le recuerda en la ciudad en algunos edificios o lugares en los que figura su nombre: Parador de Turismo, Colegio, un edificio de viviendas, Grupo de Coros y Danzas, y desde el año 2004, con esta pequeña y corta calle. Por cierto que, tanto la calle, como el edificio de viviendas, y el mismo colegio están próximos. Y hasta el mismo Parador se encuentra cerca.

Placa que indica el Parador de Turismo Fernando II de Benavente.
Relieve del sello rodado de Fernando II a la entrada del Parador de Turismo.
Colegio de Educación Infantil y Primaria Fernando II de Benavente.
Curia de Fernando II en Benavente. Parador de Turismo. (Autor: J. C. Guerra).
Pero nunca es tarde para pensar también en dedicarle un monumento en alguna plaza o calle de la ciudad, semejante al que tiene en otras ciudades fundadas y repobladas por él, o a las que concedió fueros o leyes, como es el caso de Ciudad Rodrigo.
Monumento a Fernando II en Ciudad Rodrigo.
De momento ya tiene en Benavente la estrecha y corta calle, a la que me he referido, con una placa destacada… Y no lejos de la calle el colegio, un edificio de viviendas, el parador, etc. Y algún otro recuerdo más….pero solamente con su nombre.

lunes, 21 de marzo de 2016

Alfonso Bartolomé, profesor en Benavente.


Imagen antigua del Instituto León Felipe de Benavente.

Hace unos días escribí en este blog sobre el profesor y artista Alfonso Bartolomé (Palencia 1941-Zamora 2015) recientemente fallecido. Y lo hacía con motivo de una exposición retrospectiva, organizada por el Museo Diocesano de Zamora, preferentemente de tema religioso, que se puede ver hasta el día 30 de junio, en la iglesia de Santo Tomé, sede actual del citado museo. La exposición era un reconocimiento, recuerdo y homenaje al artista.
En esta ocasión quiero comentar la relación del artista con Benavente y su estancia en la ciudad, en donde también se pueden ver algunas de sus obras. Y es que A. Bartolomé fue profesor del Instituto que por entonces existía en la ciudad, y que después pasó a ser y denominarse León Felipe. Aquí y con la ayuda de la secretaría hemos podido ver y comprobar su firma en las actas de la asignatura de Dibujo durante los cursos 1968-69 y 1969-70.  
Firma del Profesor de Dibujo A. Bartolomé. Curso 1968-1969.
A partir del año 1970  su vida profesional transcurrió por otros lugares, como Salamanca, y sobre todo Zamora, en donde vivió y trabajó hasta su jubilación y fallecimiento el pasado año 2015.
A pesar de su corta estancia en Benavente sus compañeros, profesores de entonces, Carmen Campa, Angelines Crespo, María Pose y Luisa Emilia González, lo recuerdan con cariño y conocían bien su dedicación al arte pictórico. También era familiar y querido, de manera especial, para Angel López, recientemente fallecido, pues impartían ambos la misma asignatura y semejantes aficiones.
Por nuestra parte la primera noticia de Alfonso Bartolomé, al llegar al Instituto León Felipe en los años 70, fue ver en la Sala de Profesores unos cuadros pintados por él, cuadros que todavía existen, aunque instalados en otros lugares del Centro.
Dos de ellos nos muestran poblados con casas, puertas destacadas y variadas, ventanas, y balcones. En un cuadro se ve la torre y en el otro unos soportales que nos recuerdan a pueblos cercanos de esta misma provincia.Y a destacar los colores en tejado y fachadas, colores vivos que tanto utiliza en sus pinturas.

Firma del artista en los cuadros aaanteriores, año 1968.
El otro cuadro es la pintura de un Calvario, Cristo en la Cruz, como los que él solía hacer y qué tanto le distinguen. Y a sus lados, en posición vertical San Juan y la Virgen María. De traza románica, tiene a sus pies dos recipientes cerámicos, en este caso cerámica de Talavera.

El Calvario.
San Juan y la Virgen María.
 Alfonso Bartolomé, además de la pintura, era conocedor del arte de la vidriera y de mosaico, realizando algunas obras en iglesias de la provincia. Precisamente una de ellas es el mosaico que decora la fachada de la nueva iglesia de El Carmen de Renueva, iglesia bendecida y consagrada en el mes de julio de 1968. Tal vez por estas fechas el profesor A. Bartolomé ya estuviese destinado al Instituto de Benavente.  
Fachada de la iglesia del Carmen de Renueva.
J. Muñoz Miñambres dice de la iglesia, entre otras muchas cosas, que es amplia y esbelta en su interior. Está formada por tres naves, de líneas modernas y está adornada con sencillez y seriedad. En la fachada luce un monumental mosaico de 42 metros de superficie, obra del artista zamorano Alfonso Bartolomé, en el que se representa a la Virgen del Carmen entre las olas del mar, y a ambos lados de la monumental figura, las de Elías el profeta y San Simón Estok.
Mosaico de A. Bartolomé en la fachada de la iglesia.
La Virgen del Carmen en el centro de la imagen como patrona, pues a ella está dedicada la iglesia. El Niño Jesús en su regazo portando el escapulario. 
Virgen del Carmen con el Niño Jesús, que tiene en su mano el escapulario.
A un lado de la Virgen vemos la imagen de Simón Stock, (Kent, 1165-1265), carmelita inglés, que entró de la orden en 1218 y llegó a ser prior o general de la misma. Se cree que en una visión la Santísima Virgen le sugirió la devoción del Escapulario, de la que fue el propagador. Su fiesta se celebra el 16 de mayo.
Imagen de Simón Stock.
Y al otro lado el profeta judío Elias, nacido en Jordania (s. IX a. de C.) Aparece con frecuencia en la iconografía cristiana. Ejerció su ministerio con numerosos milagros y aparece vestido con el hábito de los carmelitas, pues lo tienen como su fundador. Su historia y profecía se cuentan en el libro de los Reyes.  
El profeta Elías, con hábito carmelitano.
 También se conserva en Benavente, concretamente en la iglesia del Colegio de San Vicente Paúl, otro Cristo, pintado a su estilo, como los demás. Con los mismos colores y demás paticularidades. Pero a sus pies, además de la calavera, que representa a la muerte, se ve un grupo de personas vestidas con la capa alistana. Tal vez quisiera hacer un referencia a la celebración que durante la Semana Santa tiene lugar en Bercianos de Aliste, o simplemente a la procesión de las Capas pardas que se celebra en Zamora.
Cristo en la Cruz. (F. Horacio Navas Juan)




Benavente quiere también agradecer su trabajo y estancia en la ciudad al profesor y artista zamorano Alfonso Bartolomé, fallecido el pasado año. Y ofrecerle este pequeño homenaje del recuerdo.





jueves, 17 de marzo de 2016

Alfonso Bartolomé, artista. Exposición en Zamora.


El pintor el día de la presentacion de su cartel.  Semana Santa 2014.
Día de la inauguración de la Exposición en el Museo Diocesano de Zamora.
Hasta el día 30 de Junio se puede ver en la Iglesia de Santa Tomé de Zamora, actual se del Museo Diocesano, una exposición a dedicada recodar la obra del artista Alfonso Bartolomé, que además de profesor de dibujo en Centros Escolares  se dedicó a la pintura y otras artes decorativas como la vidriera, el mosaico, y también algo de escultura.
Aunque nacido en Palencia se trasladó pronto a la capital zamorana en donde transcurrió el resto de su vida, tanto personal como profesional.
Su formación académica la realizó en la Escuela Central de Bellas Artes de San Fernando de  Madrid. Y en la Escuela de Bellas Artes de de San Carlos de  Valencia en donde se introdujo en las técnicas de la vidriera y el mosaico.
Terminada su formación, y ya en Zamora en el año 1966,  fue profesor de dibujo  en institutos de la capital y también de la provincia, concretamente Benavente, en donde estuvo varios años.
Durante su estancia en Benavente realizó y regaló al centro tres cuadros que se conservan en dependencias del centro. Sobre ello escribiré próximamente.
Impartió clases también en la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Salamanca (1975-1982) de la que fue director varios años y en la Escuela de Magisterio de Zamora (1977-1982). Dirigió igualmente el Aula de Arte de la Caja de Ahorros Provincial de Zamora  (1974-1985).
En el año 1993 tras obtener la cátedra de Artes Plásticas y Diseño, fue destinado a la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Zamora, terminando aquí su amplia labor docente.
Practicó diversas técnicas artísticas: dibujo, grabado, pintura mural y de caballete, vidriera, mosaico y escultura.
Con sus variadas obras participó en muchas exposiciones individuales y colectivas, obteniendo varios premios y distinciones.
Su obra pictórica, que es la más abundante, destaca por el color, vigoroso, cálido, luminoso, vibrante y contrastado, y una  pigmentación densa,  de textura táctil, aplicada con espátula, pincel, y hasta con los dedos.  Y unas formas esquemáticas, sumarias, rotundas, volumétricas.
Todo ello hace que el resultado final de la obra este cargado de una importante fuerza estética que produce en el espectador un emocionante impacto visual.
Su forma de proceder en la realización de su obra, preferentemente de sus pinturas, crea en el autor una personalidad artística propia y coherente, un universo particular que  partiendo de la realidad misma y pasando por la intimidad de su ánimo, finalizaba en una obra intensamente vitalista.
Sus temas preferidos y que reproduce, no sin cierta nostalgia por su inminente desaparición son retratos, paisajes, casas rurales, horizontes urbanos, bodegones, objetos artesanales etc. También imágenes religiosas que habían perdido su carácter cultual, interiores con ventanas, visillos, paños, macetas con flores, etc.
Casas como estas y con colores vivos, uno de sus temas preferidos.
Vista general de la provincia de Zamora desde el río Duero.
Variedad de cuadros en una de sus exposiones, celebradas en Zamora.
A. Bartolomé, junto a un cuadro de su temática preferida.
Y cómo no podía ser menos la ciudad de Zamora, con su románico, Semana Santa  y sus fiestas y tradiciones, son tema imprescindible en su obra  y por lo que le reconocen fácilmente las gentes de su tierra.
Cartel para la Cofradía de la Virgen del Yermo.
Una procesión de las que se celebran en Zamora.
El Cristo de su cartel para la S. Santa, 2014.
En esta exposición del  Museo de Zamora hemos visto,  principalmente, lienzos de temática religiosa, alguno de ellos iniciado o inacabado, donde se evidencia su afecto por las imágenes medievales, ya sean de culto o museográficas. 
El programa de la exposición con algunos de los cuadros.
Un visitante en el Museo de Zamora viendo la exposición de A. Bartolomé.
También se exhiben bocetos de vidrieras de hormigón armado y de mosaicos murales como es el caso de los que realizó para  las fachadas de las iglesias de San Benito de Zamora (antiguo monasterio de las Benedictinas) y para la de Santa María del Carmen de Renueva de Benavente. 

Tambien se exponen cuadros con trabajos en vidrieras y mosaicos.
Con esta exposición el Museo de Zamora ha querido expresar su agradecimiento a un artista que contribuyó a ennoblecer el arte cristiano de la Diócesis de Zamora dejando ver en su obra ese carácter personal, particular y distintivo que muestra.
(Parte del texto procede del programa editado para la exposición por J. A Rivera de las Heras, y las fotos de la página Web de la Diócesis de Zamora)

sábado, 12 de marzo de 2016

Calles de Benavente: Cuesta del Hospital



En el año 2004 con el nuevo callejero  de Benavente,  aprobado  por la Corporación Municipal de aquel año, el Ayuntamiento recuperó las antiguas denominaciones de corrillos y plazuelas.  Y también las de  costanillas y cuestas. Son varias las que existen al tratarse de una ciudad, cuyo casco histórico, y zona más antigua, se encuentra en lugar elevado, en un altozano, sobre las vegas de los ríos  Esla y Órbigo, como se puede comprobar desde las Paseos de la Mota, lugar elegido para construir el Castillo-Palacio los Condes de Benavente.
La denominada en la actualidad Cuesta del Hospital se llamó antiguamente, y según consta en el plano de 1924, Cuesta de San Antón, seguramente porque al final de la misma y no lejos del comienzo de la calle dedicada en la actualidad al santo, había una ermita  con la misma advocación.
Posteriormente recibió el nombre de Calle Cuesta del Hospital, lo cual suponía una doble denominación: o se llama “calle” o se llama “cuesta”.  Para evitar esa ambigüedad  a partir de 2004, quienes prepararon  el nuevo callejero  recuperaron  su denominación tradicional de Cuesta del Hospital. (J.I.Martín Benito-J.C. de la Mata Guerra. Las Calles de Benavente, año 2004).
Por el este se extiende  desde la Plaza de la Soledad hasta la Avenida Maragatos y calle de los Herreros o, si preferimos, hasta la conocida y popularmente denominada como Plaza de la Fuente, pues a dichos lugares se puede llegar desde ella.
La Cuesta del Hospital es una de las calles con más tráfico, pues se la considera como una de las entradas a la ciudad, ya que por ella se accede a la zona centro, a otras muchas calles y también a algunos barrios como Las Eras, San Isidro, Maragatos, La Malvinas, etc.
También son muchas las personas que tienen que cruzar la calle cada día, para ir a su trabajo, a realizar las compras, o a otro tipo de servicios, sociales o sanitarios, al encontrase en ella el Hospital Comarcal y también el Hogar del Jubilado o Centro de Día para los Mayores. 

La Cuesta del Hospital vista desde la Plaza de la Soledad.
Otra imagen subiendo desde la Plaza de la Soledad.
El Hospital Comarcal del Sacyl, desde su nueva reforma efectuada no hace muchos años, y por el hecho de prestar más servicios, es más frecuentado y su acceso a las urgencias y otros servicios se hace desde esta calle denominada Cuesta del Hospital.
Vista de una parte del edifcio del Hospital Comarcal del Sacyl.
El Hogar del Jubilado, o Centro de Día para las personas mayores, fue inaugurado en el mes de abril de 1989, y ha tenido y sigue teniendo gran aceptación desde entonces. A él pertenecen, como socios, más de 10.000 personas, y son muchas y muy variadas las actividades que en él se realizan a lo largo del año.
Hogar del Jubilado o Centro de Día para personas mayores.
Para cruzar esta calle, con nombre de cuesta, que es muy transitada por vehículos, existen varios pasos de peatones, pero también una pasarela en la zona más elevada de la misma. Pasarela usada diariamente por muchas personas para ir desde la calle de los Herreros hasta la Plaza Virgen de la Vega, Avda. maragatos y demás calles del oeste de la ciudad.
Pasarela al final dela calle, yendo desde la Plaza de la Soledad.
Los edificios de esta calle, son casi todos de nueva construcción y de varias plantas. Algunos están construidos en el lugar en que se encontraba la antigua fábrica de harinas de Herminio García Huerga, conocida como la de las Cabitas, una de las varias que había en Benavente. De momento no dispongo de imágenes antiguas.
Hacia el centro de estos edificios estaría la fábrica de harinas.
Lugar concreto que ocuparía la fábrica.
Tan sólo hay dos o tres casas que nos dejan ver la situación anterior y más antigua de la calle. Lo siento no disponer, de momento, de imágenes antiguas, en la que había varios cuestos y solares, que se convirtieron en edificios de viviendas y otros usos.
Algunas de las pequeñas casas y de más antigüedad que se conservan...

...Junto a edificios de varias plantas y más altura.
También hay algunos solares.
Pero el más antiguo de todos y que se mantiene en pie, como no podía ser de otra forma, es la parte de atrás del Hospital de la Piedad, o de peregrinos, del siglo XVI, cuya fachada y portada da a la calle Santa Cruz. Por este lado vemos también sus muros de piedra y otras construcciones de ladrillo, con las pequeñas ventanas de época pasada.
A la izquierda la parte de atrás del Hospital de la Piedad.
Son varias las dependencias de este Hospital de la Piedad que dan a la Cuesta.
Muro del Hospital de la Piedad.
Al subir por esta calle-Cuesta desde la Soledad nos encontramos, una vez pasado el Hospital de la Piedad, con la Ronda del Hospital por la que podemos acceder a la calle Santa Cruz y un poco más adelante sale otra calle denominada del Doctor Ledo del Pozo que llega hasta la Plaza del Grano.  Hacia el centro de la Cuesta, y entre el Hospital Comarcal y el Hogar del Jubilado, hay un pasadizo muy utilizado para pasar de un lugar a otro.
De frente C. Doctor Ledo del Pozo. A la izquierda Ronda del Hospital.
Nuevo pasadizo entre el Hogar y el Hospital.
Otro lugar a destacar es una escalera de subida que pariendo de la cuesta llega hasta la calle del Parque, en la que se encuentra el Colegio Virgen de la Vega. Por ella suben y bajan diariamente muchos alumnos y algunas otras personas.
Entre dos pequeñas y bajas casas se encuentra la escalera.
Escalera que llega hasta la Calle del Parque.
En la parte alta de la de esta calle-Cuesta se encuentra la pasarela a la que me he referido anteriormente. Se construyó hace ya bastantes años, cuando el auge de la construcción llegó a este lugar y a muchas otras partes de la ciudad. Al edificar aquí viviendas  en donde había unos cuestos y zona verde, tuvieron la idea de la pasarela. Y parece ser que el resultado ha sido positivo al facilitar el paso de las personas por un lugar muy complicado por el mucho tráfico de vehículos que entran o suben a la ciudad por la Cuesta del Hospital.
De hecho son muchas las personas que diariamente utilizan la pasarela, para ir hacia el centro de la ciudad o regresar de nuevo a sus domicilios.
La pasarela vista desde abajo.
Pasarela y edificios desde los jardines.
Imagen desde el final de la Cuesta, en su parte alta. Pasarela al fondo,