domingo, 7 de junio de 2015

Toro Enmaromado de Benavente: Imágenes del Pasado-2. Década de 1970.



A las imágenes publicadas hace dos días en este blog añado estas otras de la misma época. Algunas ya las he utilizado al escribir sobre calles y plazas de la ciudad. Pero otras aparecen por primera vez.
Como se ve, por aquellos años, también se reunía mucha gente sobre todo el día clave y principal, cuando tiene lugar la carrera o recorrido del toro ensogado o enmaromado. Pero todavía se dominaba la situación, y era más asumible o tolerable, tal vez por ser menor el número de peñas y peñistas, oficiales unas y no oficiales otras. Y también había, por entonces, menos espectáculos musicales y sobre todo taurinos, como ocurre ahora, que además del enmaromado están los toritos del alba o matutino, y el vespertino, el toro o toros de cajón, el toro o vaca de la sangría, los toros de fuego, los toros de cajón de los Condes de Benavente, etc. Sin olvidar los toros didácticos como carretones, los toros para cortes, o recortes, los encierros de toros, etc. 
Sobre los que denominan toritos solo había uno, el del alba, por la mañana del día grande, al que acudían todos los niños de la ciudad, que por cierto eran, tal vez, más que ahora. Al haber dos, el otro corre en la tarde del viernes de esta semana festiva, pero ya no es de alba, aunque algunos lo llamen así. Es de suponer que los niños se repartirán entre los dos, a no ser que su afición y el seguimiento  del festejo por su parte sea ya tan grande que incluso superen a los mayores. Al ser más los toros, los toritos y también las charangas, chraranguitas (más pequeñas en el número de músicos) y las agrupaciones o reuniones gastronómicas, se van notando cada año más  los cambios que hay en la fiesta. Ojalá que todo ello sea para mejor, pero lo dudo, pues los excesos en cualquier cosa nunca terminan bien, ni son del agrado de muchos ciudadanos, que por más que respeten la tradición festiva, se ven afectados por ella, sin pretenderlo. Y es que los derechos, deberes y obligaciones cívicas, de todos y con todos, deben ser siempre los mismos, por más que algunos  piensen y digan  que se trata de La Fiesta del Toro Enmaromado.  

Llegada del Torito del Alba en la mañana de un miércoles por los años 70.
Las peñas existentes se organizaban y salían desde la Mota para el desfile
El Paseo de la Mota se llenaba de gente.
Una peña desfilando, con ritmo, por la calle La Mota.
Cuesta del Portillo de San Andrés. El Torito del Alba está al llegar.
El comienzo de la maroma. Calle C. Portillo S. Andrés.
La peña de la borriquilla pasando por una calle.
Toyi y Pedro junto a los ábsides de Santa María.
Amigas y hermanas esperando ver pasar al toro.
En un balcón de la plaza de la Madera, para verlo mejor.

jueves, 4 de junio de 2015

Toro Enmaromado de Benavente: Imágenes del Pasado. Década de 1970.



Nadie pone en duda que son muchas las imágenes que existen de esta fiesta, algunas muy antiguas, como hemos podido ver a lo largo de los años. Recientemente lo hemos comprobado con el libro editado por el Centro de Estudios Ledo del Pozo. Memoria Gráfica de la Fiesta. Siglo XX. Pero seguro que habrá muchas más que darían para editar otro libro. Y es que desde el comienzo y uso de la fotografía han transcurrido ya muchos años. Técnicamente se ha pasado por distintas etapas hasta llegar a la actualidad en que el mundo digital lo domina y actualiza rápidamente todo.
Las fotos antiguas agradan más a las personas de edad, que vivieron y convivieron de forma distinta en ese pasado, que nos muestran las imágenes. Personalmente me ocurre lo mismo. Repasando mis archivos de negativos, o fotos en papel, me sorprendo y admiro más aquellas que son de hace ya muchos años, como las que publico hoy aquí. Son fotografías realizadas por mí y reveladas y ampliadas en el laboratorio del Instituto, después de vivir, de forma más participativa, diversos momentos de la fiesta.
Fotos de la zona del nuevo Toril momentos antes  de la salida del Enmaromado. En una de ellas el  toril rodeado de gente, esperando la salida del toro. Y en la otra colgado sobre una cuerda un muñeco vestido de torero, colocado allí para dar la bienvenida al toro, cuando salga. En el centro de esta foto vemos, con sombrero, a PedroTorres Arenas, ya fallecido, pero que, como benaventano de pura cepa, vivía intensamente la fiesta.
El toril y su entorno lleno de gente.
Pedro Torres Arenas, con sombrero, en el centro de la foto.
En las siguientes se ve la plaza de la iglesia de Santa María del Azogue y sus alrededores. Sobre estas tengo que decir lo siguiente: El párroco D. Leovigildo permitía, por entonces, ahora ya no, subir a la torre a algunas personas, para ver el espectáculo desde las ventanas, como se ve en las imágenes. Desde la altura saqué algunas fotos de toda la plaza. 
Desde las ventanas de la torre vimos toda la plaza.
Algunos se subían a la ventanas exteriores  de la iglesia.
Otros se colocaban sobre las piedras de la puerta del oeste.
Por otra parte, durante el recorrido del toro, algunos jóvenes y no tan jóvenes se subían a las ventanas y puertas de la iglesia, lo que producía mala impresión, aparte de contribuir algo al deterioro del edificio artístico más importante  de la ciudad. Pero, por las quejas del párroco y de algunas personas amigas y amantes del patrimonio, se consiguió que, por parte del Ayuntamiento, se prohibiese subir y desde entonces ya no se hace. Una buena idea, aceptada por todos. Así se podía hacer también en la actualidad, en momentos y lugares en los que, durante la celebración de algunos actos en esta fiesta, es evidente, y frecuente, el daño y las molestias reiteradas a vecinos, e incluso en las calles y plazas. Es injusto y desacertado pensar, o decir, por parte de quien sea, que, por ser fiesta, todo vale, y hay que soportarlo todo, incluso hasta lo prohibido, o no permiitido, en un día normal. 
Otras fotos son de la Plaza de la Madera, uno de los lugares más concurridos y fotografiados porque en ella está la primera argolla del recorrido. Los edificios han cambiado desde entonces.
Toro en la argolla de la Plaza de la Madera.
Algunos edificios de la plaza se estaban construyendo.
Otra vista de la plaza con el toro enargollado.
También vemos algunas imágenes de la plaza de San Martín, plaza llena de banderitas y con un aspecto distinto al actual.  Aquí estamos agarrados a la maroma, pero lejos del toro.
En la Plaza de San Martín, agarrados a la maroma.
Y otras fotos, tambien de aquellos años, más cerca ya del matadero y con otros protagonistas.

Con amigos y conocidos, cerca ya del matadero.
Otro grupo de amigos en la calle del Agujero.
Eran otros tiempos y otros años, nada menos que en la década de 1970, a partir de 1971, año en el que yo llegué a Benavente. Las hice desde diversos lugares, estas y otras que publicaré en breve.  Aunque ya han pasado casi 40 años las vivencias eran algo distintas, lo mismo que los lugares y las gentes. Pero con el paso de los años toda ha cambiado, ojalá que sea para mejor. 

martes, 2 de junio de 2015

Toro Enmaromado de Benavente: Programa del año 1960.



Tengo en mis manos los programas de la fiesta del Toro Enmaromado de Benavente de los años 1960 y el actual de 2015. Pero no pretendo escribir sobre los dos, sino solamente sobre el primero, pues en poco son  comparables  ni en su formato, ni en la impresión y contenidos. Y es que desde hace ya bastantes años con las nuevas técnicas digitales, en el programa del toro predomina el color, tanto en la diversidad y abundancia de anuncios, como en las fotografías, dibujos y otras imágenes  de la fiesta,  si exceptuamos las que tienen más antigüedad, que también destacan poco entre tanto colorido.
Sin embargo vemos que el de 1960, de acuerdo con la técnica de entonces, está impreso en general en blanco y negro, tanto los textos como algunas de las fotografías de su interior. En otras se ha usado el color azul, lo mismo que en los anuncios, que también son abundantes, aunque la mayor parte de ellos son textos, sin imágenes. También en la portada y contraportada se han  utilizado los colores rojo, verde y amarillo. En la portada dibujos del toro y la maroma y de la Virgen de la Veguilla y en la contraportada el anuncio de la empresa Michaisa, de talleres Mecánicos y de venta de tractores y maquinaria agrícola e industrial, empresa que, al parecer, tenía gran actividad en aquellos años.
Portada.
Contraportada.
Nos llama la atención el que en varias páginas del programa de 1960 se publiquen, después del pregón inicial, artículos, escritos o comentarios relacionados con la ciudad de Benavente y sus monumentos, la fiesta del Corpus, fiestas típicas taurinas, Benavente ciudad turística, y, por supuesto, los que hacen referencia al toro enmaromado. Y los firman algunos periodistas conocidos por sus escritos o colaboraciones en otros medios informativos locales o provinciales. Incluso hay una colaboración en forma poética titulada Otro año más, escrita por un tal Alvaro Roda, que podemos ver aquí:
Pregón de las fiestas.

Colaboración poética.
En las páginas centrales se encuentra el programa específico y concreto de la fiesta. Eran cinco días, del 14 al 19 de junio de 1960, año especial, parece ser,  pues se conmemoraba el XXI aniversario de la reanudación de la fiesta, que fue suspendida durante los años de la guerra civil. De ahí que fuese más el interés mostrado en los actos de la celebración durante los cinco días, que se presentan con los siguientes titulares en cada uno de ellos: Llegada del toro. Día del toro. Verbenas y concursos. Descubriendo artistas. Festejos populares y deportes.

Cinco días de fiesta.
Miércoles, el día del Toro Enmaromado.
El miércoles, víspera del Corpus, era y sigue siendo el día del toro enmaromado: A las seis de la mañana diana a cargo de los Gaiteros del Miño, con disparo de cohetes y concentración en la plaza mayor, a las ocho tomar los churros calentitos con aguardiente. A esta hora salida del Torito del Alba que correrán los aficionados hasta la edad de doce años.
A las doce los Gigantes y Cabezudos danzarán por las calles repartiéndose en la plazas caramelos a los niños.
A las cinco y media en punto disparo de la primera bomba anunciando la salida del toro que hará el recorrido por las calles de costumbre.
A las ocho en las plazas de Santa María y calvo Sotelo bailes populares. A las diez se disparará bonita colección de voladores y se quemará otro torito de fuego.
De ocho a tres de la madrugada, en el Parque de la Mota, extraordinaria verbena en la que tendrá lugar el concurso de resistencia de jotas.
Actos durante los demás días festivos.
En los demás días festivos, como se ve en la imagen, no faltan los concursos, las exposiciones ni otros espectáculos taurinos, como los toros de fuego, etc. Ni tampoco la chocolatada y algunos deportes.
También son abundantes los anuncios, como en la actualidad, con textos escritos breves. Todos ellos colaborando en la fiesta. Establecimientos comerciales, muchos de ellos ya desaparecidos.

Anuncios e imagenes de monumentos de la ciudad.
Otros anuncios de página entera, además de la contraportada, Michaisa maquinaria agrícola, como Delfín, motosierras y Luciano García de la Iglesia- Aserrería mecánica:

La última página está ocupada por el siguiente anuncio: Un Igualatorio Médico Vallisoletano con sucursal y atención a clientes en Benavente.
En el programa hay  nada menos que 24 fotografías insertadas en las distintas páginas de la publicación, unas reflejan los monumentos artísticos de la ciudad y otras los distintos momentos de la fiesta del toro enmaromado pasando por calles y plazas. Fotos que, lógicamente, corresponden a años anteriores al de la edición de este programa de 1960. He aquí algunas de ellas:
Página con imágenes del Hospital de la Piedad.
Imágenes de la iglesia de S. Juan del Mercado.
El toro enmaromado por calles y plazas.
Estoy seguro de que este programa de 1960, será del agrado de muchos, cuando  lean lo que en él se escribe o cuenta, sea en prosa o en verso, y también  les agradarán las fotografías de aquellos años. Y es que, por entonces, la fiesta del toro todavía no había perdido su carácter tradicional, ni lo fundamental de la misma, que se centraba en correr un buey o toro enmaromado la víspera del Corpus…Ojalá que todo lo demás que hoy adorna la fiesta: las músicas, las charangas, los toritos del alba, y los toros en todas sus variedades: de cajón, de sangría, etc. etc., no desvirtúen ni oscurezcan lo tradicional de la misma. Y es que las tradiciones, y más si cuentan con antigüedad, son muy exigentes con el pasado, al que hay que respetar en lo posible.