jueves, 25 de septiembre de 2014

Benavente: Mercado de las Verduras y Frutas.



Mercado del jueves en la Plaza Mayor de Benavente.
Se celebra todos los jueves del año. Y si en alguno de ellos no es posible por alguna razón, como ocurre si el lugar de la celebración está ocupado o dedicado a otra actividad, el mercado se traslada a otro día de la semana, sobre todo al miércoles. Y es que para muchos de los vendedores, casi todos de Benavente y pueblos de la comarca, unos hortelanos o pequeños agricultores, y otros simplemente revendedores de productos que ellos compran, el asistir a este y otros mercados de la zona: Zamora, La Bañeza, Astorga, etc., es su trabajo y actividad principal, con la cual viven ellos y sus familias.
Antiguamente se celebraba en la Plaza de San Martín, como se puede ver en las imágenes, pero desde hace ya tiempo lo hacen en la Plaza Mayor, que, como es un lugar de aparcamiento autorizado, tienen que avisar con antelación a los usuarios, para que retiren sus coches. A pesar de ello siempre hay alguno que se olvida y allí sigue el coche hasta que se lo retire la grúa municipal. Todo ello se evitaría si la Plaza Mayor de Benavente fuese peatonal, como ocurre en todas las plazas mayores de Castilla y León y también en la mayor parte de las de toda España. 
Sacos con pimientos en la Plaza S. Martín.
Vendedores y compradores en un día de invierno.
La Plaza presentaba un aspecto distinto a la actualidad.
Al mercado del jueves con pellizas, chaquetas o mantones. 
La Plaza Mayor se llena de personas el día del mercado.
Uno de los hortelanos que hay en Benavente con productos de su huerta.
Puestos con verduras de hortelanos de pueblos de la comarca.
Además de la Plaza ocupa dicho mercado la calle de la Encomienda, sobre todo en los meses de la recolección de los pimientos y algunos otros productos de la huerta, que son más abundantes y perecederos. Y una parte de la plaza del Grano, en la que se suelen colocar principalmente revendedores, que compran en almacenes y también a los hortelanos locales y comarcales.  
Muchos de los puestos de esta plaza son de revendedores.
Los de Carracedo en su puesto de venta.
Vista general de la Plaza del Grano.
No es lo mismo ver el mercado en el invierno que durante los meses del verano y el otoño, meses de recolección, y en los que se ofrecen más y mucho mejores productos  procedentes no sólo de esta zona, sino también de otras próximas, y hasta de otros   lugares de Castilla y León y de  España.
Basta pasar o pasear un jueves del mes de agosto por las calles de la ciudad o por aquellas cercanas a la plaza mayor para comprobar las muchas personas que se acercan a Benavente para hacer sus compas de todo tipo, pero también de verduras y frutas, las que se ofrecen en el mercado. La gente pregunta por los precios y se fija en la calidad. Y distinguen muy bien a los hortelanos, muy pocos ya, que traen a la venta las cebollas, pimientos, repollos, tomates, etc., que el día anterior sacaron de la tierra de su huerta, de aquellos otros que solamente se dedica a vender y comprar lo que otros han conseguido con su trabajo personal.
Los productos a la venta son, principalmente, hortalizas, verduras y frutas, aunque también hay algunos que, ocasionalmente y según la época del año, venden legumbres, quesos, bacalao, miel, etc.
En el mercado de los jueves los vendedores tienen su puesto fijo. Algunos son de Benavente, otros de pueblos de las riberas de los ríos Tera, Órbigo, Eria, Esla y Cea, o de los arroyos Almucera, Castrón o Zamarrilla, ríos o arroyos que surcan y riegan las tierras de esta comarca de los Valles de Benavente, comarca a la que alguien un día denominó, y no sin motivo o razón, pequeña Mesopotamia en el norte de la provincia de Zamora.
Y muchos de los compradores, asiduos al mercado semanal, tienen ya sus vendedores preferidos, unos eligen a los de Pumarejo, Aguilar, Micereces o Colinas; otros a los de Quiruelas, Brime, Rosinos, San Pedro de la Viña o Carracedo; algunos prefieren a los de Bretocino, Villaveza o Barcial; los hay que compran a los de Villaferrueña, Santa Maria de la Vega o Arrabalde, etc. Pero también pueden elegir vendedores, o mejor dicho revendedores, de La Bañeza, Toro y el Bierzo, que traen productos de estas zonas, también de buen aspecto y mejor calidad.
El mercado transcurre con normalidad durante las mañanas del jueves, mañanas que presentan un aspecto festivo para la ciudad, además de contribuir a su economía y progreso. Comercios, barres, restaurantes y hoteles son más visitados el jueves que los demás días de la semana. No es de extrañar que también este día sea el más propicio para otras actividades, culturales o simplemente de propaganda de los diversos actos públicos o políticos que se celebran en la ciudad y comarca. 
Benavente nada sería, o mucho menos, si le faltasen los mercados y todo aquello que esté orientado a las personas que viven en su comarca. Necesita potenciar y prestar atención aún más a esta actividad mercantil, y completarla con muchos otros actos, de otro tipo, accesibles para todos.
Los ríos y arroyos, con sus cauces y canales, lo mismo que  las tierras y huertas que riegan con sus aguas, merecen gran respeto, atención y cuidado. Pero mucho más las personas a las que llamamos hortelanos, que son las que con su trabajo diario consiguen todos estos productos que vemos y podemos comprar en el mercado. Estos sí que son merecedores, un día al año, de un recuerdo y homenaje por parte de la ciudad de Benavente, como hemos podido comprobar que se hace en otros lugares. Además este recuerdo podía quedar plasmado en la realización e instalación, en algún lugar de la ciudad, de un monumento-escultura pública a ellos dedicada: “Monumento al hortelano”. 
Este tipo de esculturas-monumentos existen en muchos otros lugares y algunos no tan alejados de Benavente como ocurre en Gordoncillo, pueblo que destaca y tiene fama por el cultivo de sus tierras, pero principalmente los viñedos a lo que se dedican muchos de los vecinos. De hecho se celebran dos ferias, la de la Vendimia y la del Vino. Pues en Gordoncillo se pueden ver tres esculturas adornando ya algunas de sus calles, todas ellas relacionadas con el trabajo en el campo y en las viñas. Una de ellas es la imagen siguiente a la que llaman: Señora de la Vid.

Señora de la Vid. Gordoncillo (León)