jueves, 17 de enero de 2013

Calles de Benavente: La calle de san Antón.


La calle con nuevos edificios de viviendas.
Esta calle es también una de las más antiguas y más conocidas en la ciudad de Benavente, pues ya desde el XIV se cita y se tienen noticias sobre la existencia de una de las puertas de la muralla o cerca de la Villa con este nombre, la puerta de san Antón. No se encuentra lejos de esta antigua puerta. Como tampoco la antigua ermita que existía dedicada al santo. El lugar más exacto podía ser en torno al viejo toril y zonas próximas. 
Imagen antigua de la antigua Pueta de San Anton y su entorno.
En una relación de calles, del año 1860, aparece el nombre de la calle, que estaba dentro de la cerca o muralla, pero eran muy pocas las casas que había en ella.
En la actualidad prevalecen las nuevas construcciones, como en gran parte de la ciudad, aunque existan varias casas aún sin modificar, desde hace muchos años.


Parte de la calle, con pequeñas casas que aún se conservan.
Una de las casas más antiguas.
También hay algunas casas de ladrillo y decoradas con yeserías.
Casa con tronera, de tapial, revestida con cemento.
 
Entramado de la casa anteior.

   Otra de la casas de ladrillo.

Casa al final de la calle, ya en la pequeña plaza de san Antón. 

La calle se extiende desde la Plazuela del Sepulcro (denominación que no existe, pero que sería la apropiada), hasta la pequeña plaza de san Antón, lugar del que parten o desde el que se puede ir a hacia las calles Carbajés, Villalar y Roda Rancha. 

Comienzo de la calle, desde la Plazuela del Sepulcro.
San Antón fue un santo muy querido y venerado en la ciudad. Ya en el siglo XVI existió una  cofradía que tenía su sede religiosa en la iglesia dedicada al santo que se encontraba extramuros de la ciudad. Hubo también una Encomienda, que estaba no lejos a la desaparecida Puerta de san Antón. A cargo de ella un comendador de la orden de los Antonianos, que tenían un pequeño hospital para atender a pobres. Cuando la orden abandonó la sede continuó el culto al santo, protector principalmente del ganado doméstico. E invocado también en algunas enfermedades, como la denominada “fuegos de san Antón”.
Los franceses destruyeron su capilla, pero le construyeron pronto una ermita, que, según Madoz, estaba cerca de la Puerta del Sepulcro. La imagen estuvo allí hasta que la ermita desapareció. Después la trasladaron a la cercana iglesia del Sepulcro, a cuya puerta se sacaba el día de san Antón para recitarle los refranes. La imagen pasó posteriormente a la iglesia de san Juan del Mercado y allí se encuentra. (Hidalgo Muñoz E. “Más Vale Volando”. Por el Condado de Benavente, 1998)
En el nuevo callejero vemos que existe otra calle denominada de san Antón Viejo. Se encuentra no lejos de esta zona y dentro de la antigua cerca de la Villa. Es de suponer que La Encomienda, el Hospital e iglesia o ermita ocuparían un amplio espacio.
También el santo da nombre al barrio o núcleo de viviendas conocidas como Eras de San Antón, aunque solamente Las Eras sea lo más utilizado por los ciudadanos.
En la actualidad, al llegar el día de su fiesta, en alguna de las parroquias, como San Juan del Mercado, siguen celebrando el acto de la bendición de animales a la puerta de la iglesia. También hay que destacar la existencia de imágenes del santo en otras iglesias, con los atributos del báculo como abad, y el cerdo, por ser protector de los animales, principalmente domésticos. También se le invoca en algunas enfermedades, como los ‘fuegos de san Antón’ y en otros momentos de la vida.


San Antón, imagen del siglo XVI.
S. Antón. Retablo iglesia de Sta. María del Azogue.
Hoy 17 de enero, día en el que la Iglesia celebra la fiesta de san Antón, he querido pasar, y pasear, por la calle a él dedicada y recordar algo sobre el pasado de la ciudad y algunas de las tradiciones relacionadas con el santo.